Se encontraba en casa, sin quitar la vista de la pequeña ventana con la que contaba la sala de su departamento, absorta en su pensamientos.

Algo llamo su atención, trayéndola a la realidad, un reflejo de luz llegaba a su cara molestando su vista, con su mano toco el causante de aquel "ataque" inesperado a sus sentidos, un brillante brazalete que, parecía mas una esposa de plata, que adornaba su muñeca.

Era claro que aquello representaba un cello, el candado de un cofre en el cual había guardado toda su esencia mágica, así como sus poderes y claras características como hija de quien era. Bañada en la sangre de sus padres, para que nadie que no fuera un Selene pudiera abrirla

Aquel brazalete era una de las razones por las cuales le era imposible curar sus propias heridas, así como la protegida de la maldición de sangre impuesta con quien decía amarla.

Un recordatorio de aquel sacrificio que hizo para mantenerse libre.