—Ya está. Con este atuendo si podré entrar al teatro.—dijo mordiendo su cigarro al hablar.

No sabe porqué, pero sus pasos la trajeron al teatro que una vez visitó con Aitor. Una vez en frente, las ganas por entrar comenzaron a hervir en su estomago, con la esperanza de encontrarlo dentro.

Como andaba con sus ropajes de siempre y su amigo no estaba para demostrar elegancia y poder adquisitivo, tuvo que utilizar un glamour para cambiar su ropa en algo que si le permitiera entrar evitando inspecciones y malas caras.

Ahora si estaba lista para disfrutar del arte y esperar que la buena suerte le acompañara.
—Ya está. Con este atuendo si podré entrar al teatro.—dijo mordiendo su cigarro al hablar. No sabe porqué, pero sus pasos la trajeron al teatro que una vez visitó con Aitor. Una vez en frente, las ganas por entrar comenzaron a hervir en su estomago, con la esperanza de encontrarlo dentro. Como andaba con sus ropajes de siempre y su amigo no estaba para demostrar elegancia y poder adquisitivo, tuvo que utilizar un glamour para cambiar su ropa en algo que si le permitiera entrar evitando inspecciones y malas caras. Ahora si estaba lista para disfrutar del arte y esperar que la buena suerte le acompañara.
Me encocora
Me gusta
4
1 turno 0 maullidos
Patrocinados
Patrocinados