Historia registrada desde principios de los 1500
✦ Origen conocido (o lo que se permite registrar)
La primera vez que la Mansión Monsier aparece mencionada es en un documento fechado entre 1502 y 1509, según la tinta y el tipo de papel. El documento no habla de su construcción, sino de su primera renovación, lo que sugiere que para ese entonces la casa ya existía.
No había arquitecto registrado.
No había planos.
Solo se mencionaba la frase:
“La casa ya estaba allí.”
Como si la hubieran encontrado.
No construida, sino descubierta.
✦ Primer propietario oficial
El primer nombre asociado a la mansión es Gabriel Éloi Monsier, un noble con registros inconsistentes: aparece joven durante medio siglo, luego desaparece sin acta de defunción.
Las leyendas de la época decían que Gabriel no compró la mansión…
La casa lo eligió a él.
✦ Arquitectura imposible
La estructura original del siglo XVI mostraba un estilo que no existía oficialmente en esa época:
Molduras que recordaban a épocas posteriores.
Ventanas con cortes imposibles para la tecnología de 1500.
Habitaciones demasiado frías para tener chimeneas funcionales.
Pasillos que se repetían en formas no humanas.
Arquitectos modernos, intentando estudiarla, han dicho la misma frase:
“La casa fue construida con la memoria de alguien, no con planos.”
✦ Expansión espontánea (1600–1700)
A lo largo del siglo XVII, la mansión cambió de forma sin explicaciones:
Aparecieron dos torres que no habían sido registradas.
El ala oeste se duplicó en tamaño.
Las escaleras parecían moverse de lugar cada década.
Algunas habitaciones eran idénticas a estancias de palacios franceses que todavía no existían.
Los Monsier nunca negaron nada. Solo respondían:
“Las casas antiguas crecen.”
✦ Convivencia con los muertos (1700–1800)
Los documentos familiares mencionan visitas de parientes fallecidos como si fueran reuniones normales.
No espíritus vengativos, no apariciones grotescas.
Solo presencias.
Los Monsier hablaban de ellos como miembros activos de la casa.
La mansión preservaba sus voces, sus recuerdos, sus olores.
Y para finales del siglo XVIII, se registró algo impactante:
Los retratos cambiaban solos.
Ajustaban las expresiones.
Los ojos seguían a quien pasaba.
A veces el fondo de los cuadros mostraba habitaciones que no existían.
✦ El silencio del siglo XIX
Entre 1810 y 1890, la mansión tuvo la época más tranquila.
Nadie intentó venderla.
Nadie intentó renovarla.
La familia simplemente coexistió con ella.
Los vecinos decían que la casa envejecía… pero nunca se deterioraba.
Es la época donde nacieron los rumores de que la sangre Monsier no era humana del todo.
✦ El último siglo y la llegada de Mireille
Tras la muerte lenta y extraña de los últimos miembros del linaje, quedó ella.
Mireille.
La única que no envejece como los demás.
Para muchos, es la heredera.
Para la mansión, es simplemente la continuación natural.
Cuando Mireille camina, la casa cruje en respuesta.
Cuando ella está triste, el clima dentro de la mansión baja unos grados.
Cuando sonríe, se escuchan pasos ligeros en el piso superior, como si alguien celebrara con ella.
La casa no la retiene.
No la obliga.
Solo la acompaña.
Como si ambas fueran piezas del mismo rompecabezas antiguo.
✦ Detalles adicionales para enriquecer la historia
Curiosidades
La mansión tiene habitaciones que solo aparecen en diciembre.
Las paredes guardan memoria acústica: Ciertos murmullos se repiten siglos después.
Hay una habitación cerrada desde 1537, nunca abierta desde entonces.
Algunos muebles están fijados no por clavos, sino por “voluntad”.
No existe un solo registro de alguien durmiendo mal dentro de la mansión pero todos sueñan lo mismo:
Una mujer de ojos suaves sentada en una ventana, tejiendo