Han pasado tres años y seis meses desde que mi familia y yo volvimos a restablecer las líneas temporales y cuarta vez salvar al mundo.                                                        Siendo del todo sincero cuando sacrificamos nuestras vidas, todos teníamos presente que en esta ocasión sería el fin.

La línea temporal se restableció, lo que conlleva a salvar por última vez el mundo. Después de nuestro sacrificio cada uno porsiguió con sus vidas, hicimos un pacto, el cuál consistíó en que bajo ninguna circunstancia mantengamos contacto por cualquier medio de comunicación.                                                                                  Suceda lo que suceda jamás debemos volver a juntarnos.

Tenemos más que comprobado nada bueno ocurre cuando estamos todos juntos, nuestros poderes se evaporaron, al igual que Ben y Jennifer.

Volvimos al punto de partida, como si nada hubiese ocurrido, cada cuál continuó por donde lo había dejado antes de reunirnos para el cumpleaños de la pequeña Grace.

Victor regresó al pequeño y acogedor pueblo del norte de Canadá, donde monto su propio bar y una comunidad, su propio mundo.

Allison volvió acoger en su sótano a Klaus, él cuál vuelve a luchar por de nuevo seguir estando sobrio y hace de niñera para Claire al igual que de amo de casa.          Mientras Allison cambio su carrera de actriz por iniciarse como agente inmobiliario, tiene toda la privacidad que desea, mucho trabajo y mejor horario para estar con su hija.

Diego y Lila empezaron a ir a terapia para arreglar su matrimonio, finalmente al año se terminaron divorciando. Diego se marchó de casa, continúa como repartidor mientras en secreto estudía para sacarse la carrera de crimonología.                            Nunca pude disculparme por mi corto romance con Lila, la cuál sigue asistiendo a su club de lectura.

Y Luther dejo los bailes nocturnos por una licencia como taxista, ya no reside en la academia Umbrella, ya que no existe.                                                                              Diego y Luther viven juntos.

En cuanto a mí, estuve los dos primeros años en Londres. La CIA me translado a la base secreta de operaciones especiales del FBI.                                                              Los primeros meses de adaptación resultaron ser un proceso de aclimatación, cambió de horarios, costumbres, un hogar nuevo al igual que los compañeros de trabajo.                                                                                                                            Conducir por la izquierda fue lo que más me costo y también hacerme al sabor del té inglés.                                                                                                                                                                                                                                                                        A la mierda, siempre preferire una taza de café.

Recuerdo a la perfección el trato que hice con mi familia, solo me quise asegurar de que todos están bien y tienen vidas estables.

Antes de que terminará el primer año ya había resolvido más de veinte casos y subí como la espuma en la agencia, mi segundo año estuve seis meses como agente secreto. 

Fue agradable la vida de granjero, en un pequeño pueblo a las afueras de Potree (Escocia) Reconozco que al principio la vida en la granja me recordo a cuando Lila y yo vivimos meses en un invernadero.                                                                              Aquella misión me hizo conectar con una parte de mí, la cual no recordaba. Además si por una cosa es conocida Escocia es por los innumerables y preciosos paisajes naturales. También tuve mucho tiempo para pensar en mis hermanos, en lo mucho que los extraño y quiero (aunque nunca se lo he dicho a ninguno)   

 Siempre seremos una familia, en la distancia.

El chivatazo que dio pie a las noticias del inicio de mi última misión, fue el detonante perfecto para unas improvisadas vacaciones.  

Este último año pude regresar a Estados Unidos, más concretamente a mi verdadero hogar.

Echando la vista hacia atrás, jamás habría imaginado que podríamos volver a estar como hace seis años. Cuando por fin estabamos construyendo nuestras propias vidas, sin nuestros poderes y sin otro estúpido apocalipsis que eliminar para meternos en otro mucho más jodido.

Después de despertar recuerdo que lo primero que hice fue buscarlos a todos, por el camino comprobe que las líneas temporales desaparecieron, menos la original.

Nuestro plan fue un éxito.

Lo logramos.

Estoy orgulloso de cada uno de ellos.

Ahora por fin somos libres, después de todo lo que hemos vivido, nos merecemos tener una vida normal.

Quién sabe, en que otros lugares del mundo viviré.

Lo único que se es que el antiguo cinco no regresara, murió hace tres años junto con el resto de su familia.

Max Hargreeves, es mi verdadero nombre.