La élite Illuminati ha extendido su influencia hasta los confines del control mundial. No obstante, existen individuos y grupos, así como seres alienígenas, que aún no han sido sometidos a su dominio.
En una reunión, Gazú propuso la creación de un SER DEFINITIVO que cumpliera con los estándares de belleza y personalidad. Así nació el proyecto REAL-MAN.
La secta invirtió miles y millones de dólares en diversos científicos para que estudiaran los atributos físicos y emocionales que atraen y cautivan a las personas, alienígenas y criaturas. Finalmente, lograron recrear la imagen de un HOMBRE definitivo. Gazú tendría el honor de encarnar a este hombre como parte de un disfraz, aunque no le agradara la idea, lo hacía por obediencia.