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Tras su reciente estudio en el hospital, pudieron remover el ultimo chip, sin dejar un rastro más de aquel horrible suceso que tanto mal le había hecho. Hacía meses habia sucedido y aún se sentía buscada, observada, perseguida, pero ella sabía, gracias a terapia, que todo podía ser parte de su subconsciente traumado. Perdido en el tiempo. Por lo que estaba tranquila en cuanto al asunto.
Viajaba sola por la calle, presa de su curiosidad por el mundo exterior que tanto extrañaba ver, apreciar y admirar.
Todo lucia hermoso, los pajaros cantores, los autos volando por llegar a sus trabajos, las personas a sus alrededores. Tal fue su emoción por el mundo que incluso miró en las calles, como hacia antes, para encontrar animales abandonados. Fue entonces que entre uno de los callejones de camino a casa, una pelea se había formado, y debajo de ellos se encontraba un pequeño gatito atrapado por el miedo
Su amor por los animales fue más fuerte que su percatacion de peligro en esos momentos, lo que la llevó a textear un mensaje a su concubino.
📲"Esperame en casa, corazón , pronto ire. Una pelea se formo y hay un inocente de por medio tengo que hacer algo. Te amo 💖"
Envío aquel mensaje, y decidió escribir otro, pero justo antes de escribir el último mensaje, su vista se nublo con un negro mezclado con colores. Quedando noqueada sin poder haberle dicho nada más y quedando en "escribiendo...".
Horas más tarde, sus párpados se abrieron de par en par, odiando el segundo en que aquella luz blanca, que reconocía tan bien, entró a sus pupilas para quedarse como puntos negros de mareo.
—No de nuevo—
Dijo enfada dando golpes duros al aire, sin embargo sus extremidades no pudieron hacer mucho estando atadas con algo de presion. Para cuando dio un golpe a la mesa de luz a su lado, entró un doctor de bata blanca, lentes redondos, y una barba canosa, aquel que le inyectó cosas durante esos 7 años de encierro.
🩺;—Alis te mencionaron explícitamente que no podías irte. ¿Por que no hiciste caso?... debiste hacerlo, el jefe esta enojado contigo y dijo que quiere verte luego de que te inyectemos muchísimo de esto... se que no te gusta pero debes cooperar. Es tu culpa después de todo—
Un odio empecinado fue lo primero que se cruzo por su cabeza mientras que sus ojos purpura lo fulminaron con la mirada. Sabía que esto pasaría en un punto, amar a alguien más significaba posiblemente una chance de mucha discusión, o peor, su sangre corriendo por los pasillos.
No cedió ante los intentos del señor de inyectarla, al contrario, Lucía irascible lanzando escupitajos, o diversas formas de defensa. ¿Quien no lo haría?.
Con toda la paciencia del mundo, el doctor noto que precisaba ayuda. Decidido, la llevo a una sala de experimentaciones donde ella fue lanzada al medio por los guardias grandotes. Tal cual, como si fuera un trapo.
Delante de ella muchas personas la rodearon en círculo, empezando a jalar sus cabellos, sus ropas, su piel, la arrancaron hasta que nada dejaron. Más que sus emociones atrapadas en dolor e irracionalidad.
Analis empezaba poco a poco a perder la cordura que le quedaba. Recordaba los sucesos más terribles dentro de esas paredes de almohadones, donde miles de pinchazos la atravesaban.
Clavaron aguja tras aguja, dejando una especie de líquido inundar sus venas, bajar y subir por ellas, uno que sólo cambió sus ojos a un tono más oscuro, casi negro.
Los gritos de esa sala se asimilaban al dolor de una persona en un parto, o peor que ello, pues incluso los médicos debían cubrirse mientras ella sufría.
Las piernas le temblaban como témpanos de hielo, su piel agujereada perdiendo sangre no cooperaba con sus ideas fuera de lo común.
En su mente ella rogaba un cambio pronto, una fortaleza, pero era casi imposible pelear con un ser que no existía.
Su cuerpo fue transportado en una camilla con camisa de fuerza, por mera protección, hasta una sala blanca, donde fue lanzada una vez mas.
Todo lucia igual que antes durante sus masacres, solo que ahora quienes la rodeaban eran sus recuerdos buenos. O las personas que los representaban.
Aquella púrpura mirada ahora se endureció más, no podía ser real, el solo la ponía a prueba, tenía un plan pero no sabia a que iba.
El miedo viajaba en su corazon haciéndola temblar, no podia, no queria. ¿Este espectáculo quería ver?.
No podia, no debia. Hasta que sintió una corazonada que le dijo exactamente lo que sus manos debían tener. El miedo le invadió, pero no tenía otra opción, era eso o un tiro en la cabeza.
Alzó del suelo un hacha, y sin miedo comenzó a manchar sus dedos de ese liquido carmesi, perdiendo la poca humanidad que le quedaba.
Las paredes blancas pasaron a ser negras a su vista, gritos y lágrimas de su propia persona se escucharon en ese solitario lugar, donde libero una fuerza brutal que jamás habían visto los científicos.
Hoy, fue distinto, pues luego de mancharse las manos, partió el vidrio que separaba a los expertos de ella. Mostrando que era hora de que ella jugara su propio juego.
Alarmas rojas se activaron, luces titilantes comenzaron a alumbrar la escena desastrosa de ella y sus pasados, en formas de maniquíes recubiertos de bolsas de una simulación de sangre de carniceria, en el suelo sin nada más.
Cargando el arma blanca tras su hombro, camino en búsqueda de los verdaderos perpetradores del crimen. Su mente ya estaba quebrada en pedazo, su corazón por igual. No podía controlarse, no podía detenerse, ¿por qué?.
Se acercó con cuidado hacia una especie de panel de control que partió con solo su fuerza y el hacha. Dejando todo a oscuras sin sonido, con solo personas escondiéndose de ella
La verdadera cacería había empezado.
Mientras tanto, su compañero de vida, seguía buscándola con vigor y preocupación.
Parecía ir bastante bien debido a su capacidad tan grande de rastreo, pero por desgracia, mientras el estaba llegando, todo lo sucedido dentro se hacía cada vez más real. El olor a sangre se escapaba por debajo de las rendijas, asustando a su dulce amor.
Dentro de ese edificio, el terror era el evento principal.
||Si llegaste hasta acá, te lo agradezco ♡. Probablemente veas que esto es como los monoroles anteriores, y es que esa es la idea. No quiere decir que esto vaya a quitar mis publicaciones diarias, pero si voy a tratar de estar más atenta en publicarlas así que gracias por leerlo