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Aventura , Ciencia ficción , Comedia , Drama , Fantasía , Romance , Slice of Life , Otros
- Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.Esto se ha publicado como Out Of Character.Tenlo en cuenta al responder.// Saben? No deja de ser triste
Después de todo es quedarse solos por cuenta propia. Una lástima que no se sepa valorar a quienes realmente ponen el corazón en lo que le gusta, que vierta la pasión y las ganas hasta el punto de llegar a la ilusión... Y que nada de esto pueda ser visto por un ego que no deja de ser tan infantil como un niño de 12 años.
Creo que estamos demasiado grandes para seguir comportándonos como infantes a esta altura de la vida// Saben? No deja de ser triste Después de todo es quedarse solos por cuenta propia. Una lástima que no se sepa valorar a quienes realmente ponen el corazón en lo que le gusta, que vierta la pasión y las ganas hasta el punto de llegar a la ilusión... Y que nada de esto pueda ser visto por un ego que no deja de ser tan infantil como un niño de 12 años. Creo que estamos demasiado grandes para seguir comportándonos como infantes a esta altura de la vida0 comentarios 1 compartido3
¡Inicia sesión para reaccionar, comentar y compartir! - El EdénFandom Hazbin HotelCategoría Otros// Rp con: Lilith Magne //
Descendió desde los cielos, con los tres pares de alas extendidas, y tras tocar el suelo comenzó a mirar a su alrededor.
Rumores habían llegado a sus oídos en el basto reino celestial. Aburrido, paseando por los pasillos, no paraba de oír a sus hermanos hablar una y otra vez de la maravillosa creación que su padre había hecho. Los serafines también parecían de lo más satisfechos.
No era de extrañar que él no supiera nada al respecto, dejado de lado, como de costumbre, no era la primera vez que se lo excluía de los planes de la creación... Pero, sin embargo, los rumores de la última habían captado su interés y curiosidad.
Gracias a la magia del cielo, había podido apreciar un poco de lo que era un gran jardín. Eso lo había decepcionado un poco... No encontrando nada singular o especial a lo que había en su tierra celestial... Incluso, apostaba, la vegetación del cielo era mucho más hermosa que la que apreciaba en ese jardín que, luego se enteró, se llamaba "El Edén".
Se había negado a creer que ese simple jardín era lo que traía tan enloquecido de emoción y felicidad a sus compañeros y hermanos, por lo que tomó la decisión de escabullirse de los cielos y bajar a ver de qué se trataba todo aquello.
Ahora recorría el lugar andando entre los árboles. Pudo notar algunas pequeñas criaturas cuadrúpedas correr de espanto cuando lo escuchaban acercarse.
Criaturas de vida finita, por lo que había llegado a averiguar. Cuya existencia efímera no era nada en comparación a la eternidad que vivían los ángeles como él... Entonces ¿Cómo algo tan efímero, tan finito, casi insignificante podía realmente marcar un antes y un después en la tierra creada por su padre? En los planes que los ángeles con tanto esmero y cautela habían planeado. Planes en los que él jamás había podido participar a pesar de las ideas que había propuesto.
Pero por más que se adentraba en ese extenso jardín, nada encontró que lo hiciera comprender el por qué de la exaltación del cielo... Estaba resignado, creyendo que sólo se trataría del jardín en sí...
Hasta que de pronto, sus pasos se detuvieron. Una voz llegó hasta sus oídos, suave, hermosa... Una melodía única sin duda y de la voz más exquisita que jamás pudiera haber escuchado, ni siquiera en la eternidad del cielo.
Se dejó llevar por el ruido, caminando en su dirección entre las plantas, corriendo sus ramas y bordeando árboles; hasta que de pronto lo encontró.
Una criatura de lo más hermosa, perfecta... Estaba seguro. ¡Esa criatura debía de ser lo que tenía tan revuelto al cielo!
— Woah.... —
Exclamó en un susurró apenas audible. Sus ojos brillando, con rostro perplejo ante la mujer delante de sus ojos, metros más allá de donde él se hallaba oculto tras un árbol.
Intentó no hacer ruido, preguntándose si se espantaría como los animales si lo viera llegar.
Recargó sus manos en el árbol, sus mejillas teñidas de un suave carmín... Solo por inercia dio un paso al frente, pisando una rama que al crujir delataría su presencia.
En pánico de ser descubierto, sólo pudo atinar a agacharse tras el árbol, casi abrazándose con sus seis pares de alas mientras cubría sus labios con sus manos... ¿Lo habría visto?....
Le fue inevitable no asomarse un poco para ver de reojo si es que acaso tal hermosa creación se había percatado de su presencia.// Rp con: [He11greatestmom] // Descendió desde los cielos, con los tres pares de alas extendidas, y tras tocar el suelo comenzó a mirar a su alrededor. Rumores habían llegado a sus oídos en el basto reino celestial. Aburrido, paseando por los pasillos, no paraba de oír a sus hermanos hablar una y otra vez de la maravillosa creación que su padre había hecho. Los serafines también parecían de lo más satisfechos. No era de extrañar que él no supiera nada al respecto, dejado de lado, como de costumbre, no era la primera vez que se lo excluía de los planes de la creación... Pero, sin embargo, los rumores de la última habían captado su interés y curiosidad. Gracias a la magia del cielo, había podido apreciar un poco de lo que era un gran jardín. Eso lo había decepcionado un poco... No encontrando nada singular o especial a lo que había en su tierra celestial... Incluso, apostaba, la vegetación del cielo era mucho más hermosa que la que apreciaba en ese jardín que, luego se enteró, se llamaba "El Edén". Se había negado a creer que ese simple jardín era lo que traía tan enloquecido de emoción y felicidad a sus compañeros y hermanos, por lo que tomó la decisión de escabullirse de los cielos y bajar a ver de qué se trataba todo aquello. Ahora recorría el lugar andando entre los árboles. Pudo notar algunas pequeñas criaturas cuadrúpedas correr de espanto cuando lo escuchaban acercarse. Criaturas de vida finita, por lo que había llegado a averiguar. Cuya existencia efímera no era nada en comparación a la eternidad que vivían los ángeles como él... Entonces ¿Cómo algo tan efímero, tan finito, casi insignificante podía realmente marcar un antes y un después en la tierra creada por su padre? En los planes que los ángeles con tanto esmero y cautela habían planeado. Planes en los que él jamás había podido participar a pesar de las ideas que había propuesto. Pero por más que se adentraba en ese extenso jardín, nada encontró que lo hiciera comprender el por qué de la exaltación del cielo... Estaba resignado, creyendo que sólo se trataría del jardín en sí... Hasta que de pronto, sus pasos se detuvieron. Una voz llegó hasta sus oídos, suave, hermosa... Una melodía única sin duda y de la voz más exquisita que jamás pudiera haber escuchado, ni siquiera en la eternidad del cielo. Se dejó llevar por el ruido, caminando en su dirección entre las plantas, corriendo sus ramas y bordeando árboles; hasta que de pronto lo encontró. Una criatura de lo más hermosa, perfecta... Estaba seguro. ¡Esa criatura debía de ser lo que tenía tan revuelto al cielo! — Woah.... — Exclamó en un susurró apenas audible. Sus ojos brillando, con rostro perplejo ante la mujer delante de sus ojos, metros más allá de donde él se hallaba oculto tras un árbol. Intentó no hacer ruido, preguntándose si se espantaría como los animales si lo viera llegar. Recargó sus manos en el árbol, sus mejillas teñidas de un suave carmín... Solo por inercia dio un paso al frente, pisando una rama que al crujir delataría su presencia. En pánico de ser descubierto, sólo pudo atinar a agacharse tras el árbol, casi abrazándose con sus seis pares de alas mientras cubría sus labios con sus manos... ¿Lo habría visto?.... Le fue inevitable no asomarse un poco para ver de reojo si es que acaso tal hermosa creación se había percatado de su presencia.TipoIndividualLíneasCualquier líneaEstadoDisponible24 turnos 0 maullidos2
- Su esposa ha vuelto. Y él no piensa volver a separarse de su lado de nuevo.
Por su puesto, de paso le paso la actualización de todos sus lloriqueos en su ausenciaSu esposa ha vuelto. Y él no piensa volver a separarse de su lado de nuevo. Por su puesto, de paso le paso la actualización de todos sus lloriqueos en su ausencia8 turnos 0 maullidos
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- Tal y como era de esperar, nuevamente estaba encerrado en su habitación. En pijama. Rodeado de patitos de hule, prácticamente tapado en ellos mientras, con la habitación a oscuras, él yacía sentado en la cama. La sábana cubriéndolo incluso hasta la cabeza.
— ¡Señor Patington! ¡Estoy tan feliz por ti! — Exclamaba mientras la única luz en la habitación era reflejada por el televisor encendido que transmitía una particular novela romántica.... Protagonizada por patos para sorpresa de absolutamente nadie.
Sus ojos cubiertos de lágrimas mientras se sonaba la nariz con un paño y con su brazo libre abrazaba un patito de peluche casi tan grande como él.Tal y como era de esperar, nuevamente estaba encerrado en su habitación. En pijama. Rodeado de patitos de hule, prácticamente tapado en ellos mientras, con la habitación a oscuras, él yacía sentado en la cama. La sábana cubriéndolo incluso hasta la cabeza. — ¡Señor Patington! ¡Estoy tan feliz por ti! — Exclamaba mientras la única luz en la habitación era reflejada por el televisor encendido que transmitía una particular novela romántica.... Protagonizada por patos para sorpresa de absolutamente nadie. Sus ojos cubiertos de lágrimas mientras se sonaba la nariz con un paño y con su brazo libre abrazaba un patito de peluche casi tan grande como él.17 turnos 0 maullidos
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