-Hace tanto tiempo que no tenían ni una sola pista de aquella criatura, aquel extraño felino de plumaje afilado verde, culpable de múltiples desgracias y un acontecimiento muy importante en la vida de aquel grupo de jóvenes. Había distintas señales, zonas repartidas por todo lo largo de la distintas rutas que conectaban a la ciudad, pero ninguna era lo suficientemente cerca como para ir a investigar todos en grupo.

Tomaron la compleja decisión de repartirse en grupos de dos, cuidando muy bien que sean dos integrantes que, una de dos, se lleven muy bien y tengan mucha confianza entre ellos, o bien que al menos el elemento que poseen sea compatible para un posible combate. En este caso, aquel par cumplía muy bien ambos requisitos.

Desde temprano, el par había salido de casa, aprovechando el fin de semana para no faltar ninguno a clases, tras elegir su ruta y encaminarse a su destino, se adentraron a un espeso bosque en donde finalmente darían con la descripción que le habían brindado: Una extraña estructura aparentemente natural, la cual parece una extrada a un lugar desconocido.-

Bueno... Parece que es aquí. -Susurraba el azabache mientras miraba la pantalla de su móvil, sitio en donde estaba ilustrada la zona que debían investigar con cuidado.- Avisemos a los demás que lo encontramos, para que estén atentos por si acaso.