I. The Cardinal Demons (Rol Privado - Asura Kaos / Umbra Eterna )

Las fichas del dominó oscuro cayeron una tras otra en una cadena de acontecimientos que ubicaron a los actores (títeres ignorantes de los cánticos de Los Antiguos) en el punto justo donde aquel que sueña y crea necesitaba que estuviesen, por esto, una sonrisa se blandió en el rostro de aquel devorador ignoto, de luceros ocultos por la tiniebla de su capucha y máscara. Sintió todo el lugar como un dios hemático que esparcía su corrupción mediante las venas subterráneas y el vitae corrupto que inunda la zona mancillando las extremidades inferiores de todos los errantes que entre aquel mar sabor metálico divagan incautos.

Un chasquido sucedió, uno sonoro y metafísico; un estruendo casi melódico que excitó las partículas de Noxius en la sangre y que, al ser usadas tres unidades de maná almacenadas en sus ominosas arcas energéticas (el mínimo necesario para flanquear las posibles defensas enemigas), activó su trampa, la cual solidificó instantáneamente el líquido a los pies de Carnesiel para inmovilizarlo al mismo tiempo que, de forma aleatoria y desde todas las direcciones circundantes al cuerpo de la víctima, se proyectaron con diferentes diagonales a una velocidad infame, estalagmitas de sangre coagulada de un metro, tan duras como el adamatium que buscan atravesar con su aguda punta: pantorrillas, rodillas, piernas y la zona pélvica del Cardinal para fijarlo al suelo destruyendo en el proceso tejido muscular, nervios y huesos por simple placer, y que allí en medio de un caos de sensaciones exquisitas reciba el ataque de Asura de lleno.

*Por su parte carnesiel reacciono de inmediato intentando bloquear el ataque que venía desde el vórtice, su mirada se afilo, siempre fija al frente de donde proviene la amenaza latente y en una acción inmediata busco redistribuir la línea de las esferas a sus laterales buscando detener el impacto que se aproximaba creando una barrera, pero con lo que realmente no contaba el cardenal era la reacción del otro integrante del bando contrario, las formaciones puntiagudas se dirigieron al cuerpo propio del ente demoniaco, quien de instintivamente identifico aquella avanzada como más peligrosa que el ataque del serafín. Por consecuente tomo como acción principal redireccionar las esferas defensivas buscando bloquear las formaciones creadas por el ajeno, sin embargo no fue más que un fallido intento dada la energía imbuida en estas, las puntas atravesaron las formaciones circulares sin miramiento alguno buscando alcanzar el cuerpo ajeno condenándolo a lo que seria el final de su camino*…Un ataque combinado?...en qué momento….*silencio antes de terminar la frase y la mirada del cardenal se desvió hacia el enigmático ente encapuchado como si percibiese algo en este, mientras el despliegue mágico de noxius y miasma se acercaba toda velocidad, una sonrisa se demarco en los labios del demonio como si hubiese entendido algo justo antes de que la ráfaga de las corruptas energías lo alcanzara comenzando a destruir su fisionomía *…¿Quién eres….en verdad?..*Exclamo con dificultad debido al impacto que recibía en su fisionomía, dirigiendo aquellas palabras a la sombra eterna al paso que su energía se desvanecía al compás en que las energías daban paso a una destrucción de alto despliegue, destruyendo superficie, creando corrientes eólicas que se alteraban por el despliegue mágico, para aquel ente demoniaco que lentamente era destruido, sabia que no era posible quizás el esperar una respuesta del ajeno *

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*Por su parte Asura, quien se hallaba en las alturas continuaba con su accionar, su intención de finiquitar la existencia de ambas presencias mefistofélicas había sido fallida, más sin embargo cumplió con la mitad de la operación gracias a quien seria su compañero de litigio, el movimiento ajeno del mefistofélico ente era más que conocido por el azabache gracias a sus capacidades sensoriales, poco a poco el empíreo se reincorporaba con calma a la par que aquel mandoble denominado “iacta” se desvanecía lentamente una vez que había cumplido con parte de su misión, el entorno de aquel guerrero se densificaba a rápidamente en respuesta a la liberación mágica de 3 líneas de energía que había almacenado, aquel entorno no solo le sentaba a su compañero de litigio o a el mismo, sino también a aquellas entidades bajo su dominio, las cuales se alimentaban claramente del poder del infierno y que mejor que aquel ente demoniaco que antes de la caída del rey lucifer perteneció a  los querubines celestiales y apoyo la rebelión del llamado rey infernal*

*Lo primero fuero llamas oscuras que rodearon el cuerpo del azabache, una defensa propia del serafín magnificada con capacidades mágicas, las cuales convergieron alrededor del cuerpo como una esfera que cubría su cuerpo en totalidad con un diámetro de unos 2 metros, para luego de haber sido constituida liberarse como una onda expansiva que rodeaba en todos los ángulos el cuerpo del serafín, expandiéndose y contrarrestando no solo el avance de las plumas enviadas, frustrando el ataque inicial del cardenal del norte e igualmente creando una fuerza centrípeta que contrarresta el tajo enviado como segunda opción bélica hacia el serafín dejando al mismo libre de todo peligro*…¿Tienes tiempo para distraerte?...*Exclamo con total altivez el azabache hacia demoriel desviando su mirada de soslayo hacia el mismo, mientras el espacio dimensional infernal parecía alterarse desde su costado diestro, el azabache mantuvo la posición, dando la espalda al demonio cardinal mostrando una superioridad total, y luego, fue como si una hoz hubiese mancillado el entorno mismo creando una separación dimensional, en un tajo vertical que se fundía con la potencia de las dos cargas mágicas necesarias para abatir a su contendiente liberado por la fuerza del summon de Asura evocado solo para destruir a Demoriel aprovechando su sutil descuido, buscando dividir el cuerpo del gigante infernal en dos partes pero a su vez comenzar a consumirlo en las llamas negras que le otorga Baalberith al serafín que terminarían por consumir en su totalidad al cuerpo mefistofélico de lograr su cometido *

Ese dolor le hizo agua la boca y experimentar como aquella vida se extinguía gracias a la unión sensorial que tiene con el vitae de las estacas que lo empalaban, era algo que podría igualarlo con tener el más sucio de los sexos con alguna de sus amantes. La explosión por su parte no le sorprendió y cuando esta terminó simplemente se incorporó, cruzó sus brazos y esperó a que su compañero terminase con su enemigo. 

*La repercusión por la explosión que termino por destruir cada parte del cuerpo de Carnesiel, se extendía por los confines de las tierras infernales, la onda expansiva arrasaba a su paso con formaciones rocosas y parte de la superficie, poco a poco los trozos de roca que descendían impactaban con fuerza en el terreno y la capa de polvo que se elevo causa del magno impacto se iba aclarando lentamente, pero ese no parecía ser el problema. Manteniéndose levitando sin inconveniente alguno, la mirada del azabache serafín parecía perdida en pensamientos, ni siquiera se percato del momento en que el guardián del norte había sido destajado realmente pues algo había sucedido y un error demasiado básico podría haber marcado una línea diferente en los sucesos, elevo la diestra mano observando fijamente mientras las negras llamas se avivan tras del consumiendo la fisionomía del gobernante cardinal, no parecía realmente importarle, su ensimismamiento era algo atípico pero no comprendía como había sucedido *

*Intentaba rememorar lo que acabo de suceder, pero por alguna razón su razonamiento estaba bloqueado, el ataque ajeno debía haber sido repelido mas no atraído, ¿qué fue lo que mal calculo?, ¿tanto había sido su sed de erradicar la esencia de Demoriel que había cometido dos errores en una batalla que bien podría haber salido mal?, el corte dimensional conto con la suerte de la posible cercanía que existió, pues aquella entidad podría haber defendido sin inconveniente alguno, y es claro que la energía residual que ronda en el entorno termino por empujar la posibilidad de un posible impacto, cerro lentamente sus negros irises intentando recuperar la estabilidad mental necesaria de inmediato, pero comenzaba a cuestionarse  si era prematuro el accionar de la mano de Baalberith, y ese no era el mejor lugar o momento para hacerlo, si bien dos más habían caído, errores como ese podrían costarle mucho mas frente al considerado mas poderoso ser entre los gobernantes infernales después de su rey demonio *

*Suspiro con pesadez mientras comenzaba a descender con cierta lentitud hasta alcanzar la superficie, no menciono palabra alguna mientras su interior comenzaba a reiniciar poco a poco el ciclo de mana, podía sentir un poco de fatiga, realmente el desgaste mágico ejercido al momento había sido algo alto, adicional a la molestia abdominal que comenzaba a marcarse, su abollada armadura dejaba registro del impacto recibido, el cual, en el calor de la batalla pareció olvidar temporalmente, pero era claro para el que la repercusión en sus órganos podría ser severa, para su suerte la energía residual de los círculos infernales trabajaba como respaldo, dando una absorción paulatina que ayudaba a mantener activas sus habilidades pasivas, el arma su diestra palma retomo su forma original, su espada principal, la cual agito muy sutilmente para luego regresarla a su vaina, sellando su poder dentro de la misma, usar el mandoble fue una carga pesada para su cuerpo, no había tenido el tiempo para practicar con el mismo, pero había sido útil al fin y al cabo *

*desvío su torso hacia los fragmentos que quedaban del demonio del norte aun con algo de su esencia, posando la mirada en los mismos, pero el cuestionamiento en su interior continuaba, ¿Realmente debía hacerlo?, lo mas seguro es que la historia hubiese sido otra de no contar con aquel sombrío guerrero como compañero en aquel momento, ladeo un poco la cabeza a la siniestra, y ejerció algo de presión en el cuello cerrando nuevamente sus parpados, tronando la tensión en su cuello y luego regresar su atención lentamente a los fragmentos, finalmente era uno de los motivos por los que había tomado aquel riesgo, recupero algo de su semblante y camino hasta los vestigios, inclinándose sobre los mismos, con la diestra palma retiro una especie de recipiente oscuro que guardaba entre los compartimentos de su cinturón, y se permitió tomar una porción del cuerpo físico que aun quedaba de demoriel eliminando la desintegración por las llamas y absorbiendo dentro del mismo algo de la esencia residual, hecho esto guardo el recipiente y se reincorporo, llevo la diestra sobre la abolladura en sus protección abdominales resintiendo un poco el dolor *

*Observo alrededor, el entorno era desolador, había destrucción por donde se observara, no era como si le importase realmente, pero sabia que aquella cruzada aun no había terminado y debía recuperar su compostura total, decidió bloquear el uso temporal de su nueva invocación hasta entender que había sucedido, contaba que su habilidad era suficiente y de usarlo solo seria si era estrictamente necesario, dio la espalda a los restos caminando en sentido contrario buscando con la mirada a quien seria aquel ser que estaba acompañándole, también algo le inquietaba y era la reacción final de aquellos dos mefistofélicos entes frente a la intervención ajena, como si algo hubiesen notado, o quizás recordado, ¿había posibilidad alguna que sus caminos se hubiese cruzado antes?, no era un imposible si analizaba parte de la trayectoria de aquel enigmático ente, nuevamente un pequeño flachback le inundo, aquella extremidad que salió de la nada luego del impacto de demoriel, no le prestó atención en el instante dado que no debía distraerse con aquel demonio, pero era claro que había cosas que habían cambiado desde aquel último encuentro *

Respiró profundo llenado sus pulmones con aquel aire viciado y luego distensionó todo su cuerpo para así relajar los músculos y que el estrés sobre ellos desaparezca preparándose para la siguiente batalla. No podía evitar sentir un mal sabor de labios al evaluar el desempeño de su camarada. Sin embargo, entendía que su situación no era fácil y recaída una gran responsabilidad sobre sus hombros lo cual afecta su concentración o la sobredosis de poder ya hacía mella en su psique. Sea lo que fuere, simplemente guardó silencio mientras con sus manos ajustaba su armadura enrojecida por el vitae que esta absorbió de los primeros cardinales que derrotaron de forma casual.

—Cada vez se me apetece más y más ese whisky... —Dijo con sorna para luego caminar hacia Asura. —Bien, ¿Ahora hacia dónde?

*La atención del azabache se centro en la figura de su compañero, intacto, como es lo común en el, no pudo evitar sonreír de medio labio ante dicha apreciación personal, libero algo de aire de manera lenta relajando su cuerpo logrando equilibrar sus vestigios de mana permitiendo que sus canales mágicas salieran del bloqueo impuesto por los errores en su reciente encuentro, los negros irises se posaron en el ajeno rostro, su diestra palma se elevo acomodando las hebras de cabello hacia atrás *

No esperaba necesitar tu apoyo con Demoriel, te debo un par de favores…

*Respondió inicialmente mientras viraba al sentido contrario observando hacia el norte del lugar, no percibía esencia alguna en esa dirección, aunque a decir verdad en ninguno de los puntos cardenales, aunque siendo lógicos, aunque Amenadiel fuese el guardia de Oeste, los otros dos los recibieron en el sector actual que estaba cerca al norte, no seria raro que este estuviese cerca, sabia que la capacidad de amenadiel le permitía tener salto espacio temporales aunque de lapsos no mayores a un segundo por lo que no seria raro que estuviese cerca aunque no lo hayan percibido *

Supongo que Amenadiel debe estar cerca, es lo único que falta, a todo esto, ¿que fue esa extremidad que salió de tus portales?

*Pregunto con tranquilidad volviendo a girar a verle, ese hombre siempre ha sido una entidad que representa una gran incógnita, y siempre le ha respetado como guerrero, pero de alguna forma sentía que algo más había cambiado en el a lo que a simple vista se podía ver *

Apoyó el antebrazo derecho sobre el pomo de su espada mítica para optar una postura relajada mientras seguía los movimientos de Asura.

—Te tomaré la palabra, algún día reclamaré lo que se debe. —dijo impostando un tono lúgubre y tenebroso, como demonio aceptando el pacto ante el cordero. Luego no podo evitar reír.

—¿De mi portal?, es un Shoggoth, nada de importancia realmente, ya le agradecerás.

Avanzó y se posicionó al lado de Asura para observar el norte lejano.

—¿Tu notable desconcentración tiene que ver con el mensaje que recibiste de tus tierras? —de algún modo lo supo, no la naturaleza del mensaje, pero sí la presencia de su mensajero.

*El empíreo mantuvo la calma aunque era inevitable el sentir cierta sensación de sorpresa, aquellos bajo su mandato suelen ser más que excelentes en su forma de presentarse, sonrió un poco de medio labio ante el comentario durante un momento para luego exclamar con cierta parsimonia *…No es una excusa, fueron errores muy torpes, sin embargo confió en que Azrael se hará cargo de la situación en la superficie, por lo pronto…*Silencio un momento mientras sus irises se posaban en la lejanía logrando al fin percibir una parte residual de la energía ajena *….El ultimo baile esta próximo